Dar/recibir la callada por respuesta significa responder con silencio intencionado a una pregunta o situación, como muestra de desdén, indiferencia o para evitar confrontaciones. Le pregunté por qué había cambiado de opinión, pero me dio la callada por respuesta, como si no tuviera nada que decir.
Origen de Dar/recibir la callada por respuesta
El uso de esta expresión se relaciona con la idea de que el silencio puede ser una forma de comunicar una postura o actitud sin necesidad de palabras. Este recurso ha sido utilizado tanto en contextos formales como informales a lo largo de la historia, como herramienta para evitar discusiones o mostrar desaprobación.
Ejemplos de uso
- Dar la callada por respuesta:
Cuando le preguntaron sobre sus errores, optó por dar la callada por respuesta, mostrando así su incomodidad. - Recibir la callada por respuesta:
Esperaba una disculpa, pero solo recibí la callada por respuesta, lo que me hizo entender su falta de interés.
Refranes similares
- Quien calla, otorga.
- Silencio habla más que mil palabras.